Approved!

lunes, 22 de marzo de 2010

Misión En Búsqueda del Chinchivir: Approved!

El misterio del Chinchivir ha sido develado. Tras ese velo de sigilo y misterio , se esconde una bebida sabrosa, refrescante con aromas fuertes y sabores sobrios pero con un carácter penetrante y complejo... comencemos por el principio.

Es la primera misión que acepto desde que comencé el Blog, nunca creí que iba a ser con una bebida y mucho menos con el Gatorade de la época de la Colonia, con una profunda historia pero tan subestimada por el pueblo chapin, que casi vive en el olvido. Usualmente, cualquier Misión que acepto se logra cumplir sin problemas, encontrándome con obstáculos, pero todo va cayendo en su lugar hasta que se logra. El Chinchivir fue el mismo caso iniciando cuando mi abogado me contó que había leído sobre un misterioso brebaje. "Deberías escribir sobre el Chinchivir"-me dijo- y no me deja mentir, ese artículo cargaba un fuerte espíritu de aventura. Aceptar la misión fue fácil.

Previo a la búsqueda del Chinchivir hice el trabajo de investigación que ustedes ya conocen. Tras tanto obstáculo decidí el domingo aventurarme a la Antigua para el encuentro...Primera estación: el mercado ya que mi hijo, el choripan, necesitaba fuerzas para la larga caminada de la procesión, el lugar: comedor Marleny, decorado con la pasión que los antigueños demuestran por sus tradiciones.


Que mejor para agarrar fuerzas y energías desayunando un Pache condimentado con agüita de chile.
Pache: Tamal de Papa relleno de tunco y una raja de chile

Tras esa primera parada, nos dirijimos a la Alameda Santa Lucía, bordeada por el Portal del Comercio, el Mercado y un sinfín de restaurantes, comedores y panaderías. Como es época de Semana Santa abundan los puestos callejeros, ¡ah! y es verano: las calles pululan con pickups y triciclos vendiendo Seviches con "S". Para serles sincero no me gustan mucho los ceviches chapines, tienen otro concepto que los güanacos. Acá la cosa es hacerlo todo picadillo y con todo llo que se les ponga enfrente, hasta apio le hechan. Pero bueno, siguiendo con el tema, al final de la Alameda queda la iglesia de la Ermita de Santa Lucía, erigida allá por los 1500's y cabal alli estaba haciendo parada la Procesión del Señor de las Caídas.

Para encontrar un lugar decente para ver la procesión, flanqueamos los mares de gente y logramos encontrar el punto adecuado para ver la pasada del anda del Señor de las Caídas. Ver esa Anda procesional, cargada por 90 cucuruchos devotos, balanceándose lentamente por las calles empedradas, da verdaderos escalofríos y en eso retumba el bombo, un sonido seco, solemne. Es una verdadera experiencia venir a la antigua y ver verdaderas procesiones.

Cansados y satisfechos de haber visto este emocionante evento, traspasamos ese mar de gente y comenzamos la búsqueda de Míscelanea y Ferretería San Antonio, allá donde don Chepe Armas, Familia que ha guardado el secreto de Chinchivir por más de 80 años; preguntando se llega a Roma, y resulta que a la vuelta de mi hotel, a un par de cuadras se encontraba la tienda y gracias a Dios había un rótulo con la buena noticia: Había Chinchivir.
Me acerque a la tienda y quede sorprendido de la variedad de productos que venden, en verdad que es Miscelanea. Lo bizarro comenzó con el señor que nos atendió que estaba pintado de todos los colores, a causa de que había pasado toda la mañana tiñendo el aserrín con anilina. Es una ferretería surtida, con lo indispensable para realizar las reparaciones en la casa y a su vez, tienda con artículos religiosos a la venta. Aparte del Aserrín, vendían las plantillas para la elaboración de alfombras, incensarios, picos y espadas para los que impersonan a los soldados, había incienso y cucuruchos morados para los devotos.

Vine pues y le dije al tendero, -¿tienen Chinchivir?-, -y me contestó-, Claro que le tengo, y bien frío. En esos instantes la emoción me embargaba, la Misión se iba a completar con éxito. -Deme 6, por favor- le dije, y de una refri de la Coca Cola va sacando los botecitos de 250 ml, con el pálido Chinchivir. A Q4.50 de quetzal, tiene el mismo precio que la portátil de la Coca. No me pareció caro. La coloca en bolsa y salgo feliz con mis bebidas, muriéndome de las ansias por probarla. Me senté con el choripan, él también valiente y con ganas de probarlo.Como buen salvadoreño le pegue su buena huelida, para prepararme a lo que iba a tomar, mi hijo pendiente de lo que hacia...

-Interesante-, dije, esto huele a que me voy a empalagar. Se venían notas a jengibre y a especies, clavo y canela, pero no se lograban distinguir las especies y hierbas por separado. El olor era a la mezcla de especies en una limonada muy endulzada.

Bueno, al mal paso darle prisa, vine y le pegue su buen trago... y ¡Sorpresa!...NO ESTABA DULCE... En realidad tenía un saborsito como a Gatorade... -El Gatorade de la Colonia- me dije asombrado. Como les explico, tiene el cuerpo de una limonada pero una limonada agüada, refrescante. Sin embargo, lo que sobresale no es el sabor a limón, sino el sabor fuerte de especies y hierbas. El jengibre y la Canela dan un golpe seco, picante y aromático con notas de verde por la hierbabuena. Pero esto no es lo único que me impresionó.

Lo que más impresionó fue que sabía a INCIENSO!!! el sabor del incienso que encienden en la procesiones, ese olor a pino, no se como explicarles, estaba en el Chinchivir. Un sabor que evoca a lo más profundo de nuestras tradiciones católicas. Sabe pues el Chinchivir, a Cuaresma liquida, a Semana Santa. Ese es el sabor mágico de esta brebaje.

-¡Que rico!, -oí decir a una señora que salía de donde Chepe Armas, y trás otro largo trago, añadió- ¡Solo le hace falta un toque de Ron!
Para qué dijo eso, esa frase comenzó una lluvia de ideas en mi cabeza sobre el uso del Chinchivir. De inmediato y por la urgencia e importancia del caso, me comuniqué con mi abogado para contarle sobre la sugerencia de tan noble dama y decidimos reunirnos en la tarde para disfrutar juntos del Chinchivir.


Al llegar a su casa, el Chinchivir fue la noticia del día, nos preparamos unos vodkitas con Chinchivir y rasss!! para dentro, ¡Delicioso! un complemento perfecto a la bebida... un sabor poco tradicional, como siempre sobresaliendo el sabor a especies e incienso; el vodka ni se sintió.
Hasta a los monos les gustó, ahí andaban empinándose el Chinchivir de arriba para abajo, típico de bichos rockeros.

Y allí no quedó la aventura con el Chinchivir. Lo menos que podía hacer para culminar con éxito esta Misión era cocinar con esta bendita agua. A la esposa de mi abogado se le había antojado unas Salchichas Alemanas y había llevado a su casa sauerkraut para complementarlas. ¡Para que!, me di a la tarea de preparar un sauerkraut aromático y Chinchiviresco:
Freir el tocino hasta que suelte su grasa, sofreir cebolla y un poco de ajo, manzanas verdes, el sauerkraut con sus aguas, laurel y pimienta gorda, sal y pimienta, un poco de Cerveza y Chinchivir.
Ya no se podía más, ese Sauerkraut ganó en profundidad y carácter. Esa tarde, todos disfrutamos de algo nuevo, especial, misterioso y sabroso. Definitivamente una bebida digna de los dioses y de la temporada.

No se diga más, Misión Cumplida: El Chinchivir, Approved!




sábado, 20 de marzo de 2010

Light my Fire!

El fuego es sin duda alguna el mejor de los descubrimientos de la humanidad y uno de los mejores amigos del hombre. Nos da calor cuando tenemos frío, cocina nuestras comidas y mueve nuestras economías. Sin embargo, crear el fuego siempre ha sido uno de los grandes retos de la humanidad. En la prehistoria, se esperaba que un rayo encendiera algún arbusto seco y los cavernícolas se turnaban en mantener el fuego prendido. Vieran la puteada que le caía a quien se quedaba dormido y dejaba que ese fuego se apagara.

Hoy en día, seguimos teniendo problemas para encender el fuego. -¿Como?-, se dirán, si hoy en día existe una cantidad de instrumentos que nos facilitan la vida para hacerlo. Pues no, no es así la cosa, mientras más evolucionamos, más difícil se vuelve encender las brasas para realizar una buena parrillada y por esa razón me gustaría compartir unos pensamientos para evitar malos ratos que son tan frecuentes hoy en día.

A la hora de los cuetazos, nadie sabe prender el fuego pero al mismo tiempo tienen la formula perfecta para encenderlo.

Usualmente, la gente que no tiene ni idea sobre las parrilladas, y que, sin embargo les gusta hacerlas, andan en búsqueda de alguien que les encienda el fuego y como el fuego es ajeno, todo el mundo anda de metido "aconsejando" al valiente que se prestó a realizar tan difícil obra y es acá donde se comienza a ver el principal de los errores:

"prendelo con ocote", "allá en vidrí venden unos bote con combustible en Gel, solo le das mecha y ya estuvo" "encendelo con todo y bolsa y utualito está"

Nunca se les ocurra encender el fuego con cualquier material que le de mal sabor a su carne. A ver, el carbón absorbe olores, esa es su naturaleza. Si lo encendemos con ocote su hermoso trozo de carne va a tener un tufo a pino, si se enciende con la bolsa, va a saber a plástico y esos vasitos con gasolina en gel, va a saborizar su comida a gas.

Hay varias formas de encender un fuego, las aprobadas por Harry son los encendedores de chimenea, que casi nunca fallan. También están los argentinos que utilizan un brasero, que se enciende similar a la chimenea y donde mantienen carbón o leña lista y caliente para estar alimentando a la parrilla. También hay unos alambrones eléctricos que nunca fallan. Pero, si no tienen esto disponible, pues no tienen otra opción que realizarlo de la forma tradicional.

Para lograrlo es necesario hacer una montaña de carbón hueca. En ese hueco se tiene que poner un tipo de materia combustible, usualmente es papel periódico. Hay muchas formas de poner el papel. Está la técnica de la botella en el cual se enrolla en una botella, rollos de periódico, se construye una montaña de carbón alrededor de esta, se extrae la botella y se le da fuego. Otra técnica es de chuponear mechones de servilleta con aceite vegetal a modo de hacer candiles. He encontrado una "cocinita de aceite" que se ve muy interesante y la cual la estaré probando proximamente y les cuento como me fue:


El otro problema surge con los invitados y los cocineros. Todos quieren el fuego encendido y ¡YA!, y la cosa no es así. El fuego tiene sus etapas y se necesita por lo menos 45 minutos a 1 hora para que aporte el calor adecuado para cocinar y tengan por seguro, que allí van a estar, jode y jode y chinga y chinga, que tienen hambre, que si ya esta listo el fuego, que hay que soplarlo, y así hasta desesperarlo a usted y arruinarles la tarde.

Por lo anterior, les dejo unos consejos para no estar en medio de una situación no grata:
  1. Si este no es su fuego, no sea metido, que lo encienda el dueño del fuego.
  2. Si es su fuego, evite a los metidos, y la única forma de evitarlos es aprendiendo a encender el fuego, bien y a la primera.
  3. Si no sabe encender el fuego ni quiere aprender, comprese la Weber Performer, o una parrilla de gas.
  4. Tenga suficiente carbón a la mano, esto quiere decir que tiene que sobrar una puñada de carbón para el próximo asado.
  5. El fuego enciéndalo con anticipación, mejor gaste más carbón manteniendo el fuego encendido que aguantando los quejidos de su gente.
y lo más importante: cocinen. Enciendan esa parrilla por lo menos 1 vez por semana y después de 3 meses, encender el fuego será algo natural y fácil.

¡Come on Baby, Light my Fire!

jueves, 18 de marzo de 2010

La Misión: En busqueda del Chinchivir Parte 3

He realizado una encuesta donde he preguntado a parientes de mi esposa, amigos y compañeros de trabajo si conocen el Gatorade Maya: Chinchivir...

Me sorprende que absolutamente NADIE sabe que es el Chinchivir.

En las actividades preparatorias para conocer esta bebida, he tratado de hacer reservaciones en mi Hotel en la Antigua, sin embargo, no hay cuartos disponibles, no solo allí, sino que en ningún hotel argumentando que están llenos debido a la temporada de Semana Santa. Muy bien, perfecto, esta bebida misteriosa está haciendo todo lo posible para mantener ese estado de invisibilidad en la sociedad chapina e internacional.

Pues no será así por mucho tiempo, no dejaré que algo tan codiciado por cargadores e indios mayas, preparado y fermentado con una receta milenaria con poderes de los Dioses Mayas siga en ese estado imaginario. No importa, no me vencerá, el domingo voy a la Antigua, desayunaré fuerte y al coronarse el sol me apersonaré a la Ferretería de Don Chepe Armas, cansado por participar en las procesiones de la mañana y probaré este mágico brebaje y contaré todo al respecto, su sabor su aspecto, sus efectos, en fin, no será más un misterio intangible el Chinchivir.

Faltan 3 días.

lunes, 15 de marzo de 2010

La Misión: En busqueda del Chinchivir Parte 2

Me puse a investigar por la red sobre el Chinchivir, y mientras más me adentro a la historia de esta bebida, surgen más interrogantes. Aparentemente, el Chinchivir es una poderosa pócima que involucra a los más ancestrales rituales de los dioses mayas.

Los limones son las chiches de una diosa maya que se asustó y se convirtió en árbol. Alguien la rispiaba cuando se bañaba desnuda en un río. Le dio tanta vergüenza que se convirtió en limonar. La canela es la piel de una deidad guerrera que fue despellejada y que también se volvió árbol. El jengibre son fetos que fueron enterrados y se volvieron raíces picantes. El chan son barritos que una princesa se quitó de la cara y avergonzada los tiró para que nadie lo supiera. La hierbabuena de menta era un chicle que escupió uno de esos héroes que bajaban al Infierno a pasar pruebas y no quería le sintieron olor a licor.

-Ahora me toca a mi, dijo Calixto con el fondo musical de José Guillermo: Cada vez que cocinás estás en un laboratorio ancestral. Cuando el hombre decidió a ser creador, empezó a hacer cosas e inventó laboratorios. Lo que ahora son cocinas sirvieron a un inicio para experimentar qué comer y qué no comer. Si te das cuenta los elementos para la cocina, la tecnología las ciencias ocultas y no ocultas siempre es mezclar fuego, agua, aire y tierra. Imaginate, los ancestros descubrieron el gas para ponerle fuego a la estufa, viendo que el agua al hervirla produce sopas, café o simplemente se consume. Así que toda receta de cocina es una receta mágica con efectos en el cuerpo y en el alma. El Chinchivir es de las más poderosas.

Entendía al fin: Chinchivir es una bebida. Para 10 vasos se necesitan 3 limones criollos, 3 limones reales y 3 limones persas; 3 puñitos de chan; 3 rajitas de canela; 3 pedacitos de jengibre,; 3 ramitas de hierba buena de menta. En una jarra de agua se van echando los ingredientes. Cuando se echa el primero, debemos tocarnos la frente. Al echar el segundo, el corazón. Y al echar el tercero, el hígado. Es así como agregar los ingredientes se convierte en un rito se deja allí y al día siguiente, se toma.

Mi tarea era hacer el Chinchivir, dejarlo en una botella cerca de la cama de la tía Margo para que se lo tomara. Los espíritus la asistieron para que así fuera. Y así fue. Ni bien se lo tomó se sintió mejor y empezó a regar toda la casa con aquello. Al poco tiempo, , la vida de la Msrgo cambió. Dentro de las novedades estaban su coleccionismo de adornos sofisticados y muñecas antiguas y su perfección en la cocina. Creía que el Chinchivir fue una de sus ocurrencias culinarias.

Los espíritus me advirtieron en aquella oportunidad que con el Chinchivir se logra todo. Yo me lo echo en la cabeza y se me vienen ideas para escribir. Hasta te podés bañar, dijo la abuelita Anselma, pero cuidado porque exacerba algunos apetitos. Tus abuelos hombres, como son mañosos por ser hombres, se lo echan en los huevos antes de salir y luego se preguntan por qué son perseguidos por las mujeres y como vaya si nos les gusta las mañoserías, arman aquellos relajos que vos ya sabés.

Si uno se lava los oídos con Chinchivir oye cosas que no debe. Se hace más claro el violín de José Guillermo. Al Cadejo le lavan los ojos con eso y por eso cuando le salen cheles mira al diablo. Si alguien se los quita y se los pone en los ojos, lo ve también.

-esto es más fuete que la leche de cocha, dijo la tía Lita. Dicen que los chocanitos los enloquecieron con esta leche. Pero no. Eso era Chinchivir, m´hijo. Y es que si mezcla con ciertos ingredientes que no le vamos a decir ahorita, se puede hasta matar a auqien uno quiera.

Que les parece, aparentemente este Chinchivir es un tesito algo fuerte... pero que más da, ya acepte la misión...

La Misión: En busqueda del Chinchivir

El día de hoy apareció un reportaje en El Periódico acerca de una bebida misteriosa, embriagante, con aires de Gatorade Maya. La venden en la Miscelania y Ferretería "San Antonio, donde Don Chepe Armas" en la Antigua Guatemala y esto significa que es necesario cierta capacidad técnica y experiencia milenaria en su elaboración.

Aparentemente es una bebida fermentada con base de limones Indios, Pérsicos y Reales, muy buscadas por los cucuruchos y feligreses en las procesiones de Semana Santa. Yo soy una de las muchas personas que no conocen sobre el Chinchivir, por lo que me comprometo queridos lectores a aceptar como primera Misión en el dos mil diez, la búsqueda del Chinchivir, así como la investigación de sus orígenes y su respectiva catación durante una procesión al mediodía.

Dejo pues la lectura que me cautivo sobre este brebaje a su disposición y esperen los resultados sobre La Peregrinación en Búsqueda del Chinchivir

jueves, 11 de marzo de 2010

En la calle: Mercado Central de Guatemala y Bar El Portal

Un día de estos escribiré sobre los mercados en general, ahora únicamente les contaré sobre mi última visita al Mercado Central de Guatemala. Este mercado esta en las inmediaciones del Parque Centenario y la Plaza de la Constitución en el mero centro de Guate y es aquí donde se firmó la declaración de independencia de España. De las plazas se ubica, al norte el Palacio Nacional, al oriente la Catedral, al occidente la biblioteca nacional y al sur el portal del comercio, donde entre otras tiendas, encontramos el Bar El Portal el cual, según mi abogado, es el bar más antiguo de Centroamérica.

Cabe destacar la limpieza y relativo orden que reina en el centro, los edificios históricos se pueden visitar a cualquier hora y no como los de San Salvador donde es necesario hacer tours nocturnos para entrar en contacto con nuestra historia.


Como les comentaba a una cuadra al oriente se encuentra el mercado central. A nivel de la calle está su estacionamiento así como una pequeña explanada. Se ingresa al primer nivel subterráneo del mercado donde se encuentran puestos de artesanías y demás artículos típico de mercados. En el segundo nivel ya se encuentran los puestos de frutas y verduras, cárnicos y mariscos los cuales son muy limitados. Lo fuerte de esta instalación reside en dos secciones, la de comida a la vista y la de refacciones. Lo que es impresionante es la calidad de refacciones disponibles en este mercado.Como aclaración, por refacción en Guate se entiende como la hora de la merienda, por lo que en estos lugares se encuentra infinidad de preparaciones olorosas y muy condimentadas, sin embargo, están disponibles a cualquier hora del día.

Usualmente nos apersonamos con mi abogado y con todos los amigos que nos visitan al puesto Refresquería de Cristian, donde a primera vista resaltan sendas bombonas rellenas de limonada, chan, fresa, y de crema, elaboradas con agua ozonisada. Esas bebidas complementan una barra de tostadas con aguacate, frijol o panza de tunco, tripa en salsa, morcilla y taquitos de chicharrones (chicharras). También resalta el chile picante preparado con miltomates y chiltepes.
Cubrir en agua una libra o dos de miltomates, ajo, cebolla y un puñado de chiltepes, entre más, mejor. Cocer hasta que se agüaden los tomatillos y licuar. Corregir con sal y un poco de azúcar.

Sin embargo, el sábado pasado decidimos explorar otros comedores y visitamos un puesto bautizado en honor a San Judas Tadeo, el patrón de las causas difíciles y desesperadas. Por lo visto el Santo responde no solo a los ruegos, sino al trabajo duro, dado que el puesto cuenta con una gran cantidad de clientela. En el puesto de San Judas, al contrario de los frescos de Cristian, acompañan en el mostrador a la comida preparada, unas hermosas cadenas de longanizas frescas, transparentes y jugosas. Al principio no les pusimos mucha atención hasta que se nos ocurrió pedir unas longanizas fritas. No pensábamos que le hicieran batalla a la ya coronada Morcilla en salsa, reina de mi panza y antojo diario de mi paladar. Estábamos muy equivocados; puedo afirmar que esta longaniza es la mejor que he comido sobresaliendo y poniendo en duda a las longanizas nahuizalqueñas, que hasta en ese momento, fueron dueñas de mis antojos. Resalta cierta frescura en este embutido, con un balance perfecto entre grasa, carne y verduras. El sabor a cuche es lo que predomina y es a mi parecer el secreto, no hay especies que entren en lucha con los sabores.

Asimismo, hay otra refacción que reclama su lugar y se llama la doblada. Es una tortilla gruesa frita y rellena de hilachas (carne deshilada o deshilachada)cubierta de aguacate queso duro y cebollitas.

Para finalizar, me gustaría invitarles a lo mejor que se puede encontrar en este mercado y son las patitas de tunco en escabeche. El escabeche es de respeto, aunque no se compara al de mi abuela la Julia Parker. La patita está curtida a la perfección y resaltan los olores a laurel y clavo.

Ya saben, si nos visitan y andan de goma y con hambre, no solo los llevaré a comer al mercado central sino que puedo acompañarlos a invocar con ruegos a San Judas:
¡Santo Apóstol San Judas, fiel siervo y amigo de Jesús! Te imploro hagas uso del privilegio especial que se te ha concedido, de socorrer pronto y visiblemente cuando casi se ha perdido toda esperanza. Ven en mi ayuda en esta gran necesidad, para que pueda recibir consuelo y socorro del cielo en todas mis necesidades, tribulaciones y sufrimientos, particularmente por mi deseo de saciar el hambre con abundantes viandas divinas, y para que pueda alabar a Dios contigo y con todos los elegidos por siempre.

Satisfechos saldrán sin duda de este viaje a lo mejor de los mercados de Guatemala. Sin embargo, la cereza en el pastel es coronada con una visita al Bar El Portal. Ubicado en el Portal del Comercio, hay muchas historias sobre el mismo: que es el bar más antiguo de Centroamérica, que se agarraron a monazos los presidentes de El Salvador y el de Guatemala, como que fue el bar donde bebía el mercenario Che Guevara en su paso por Guatemala. Sea cual sea su historia, este bar lo encierra a uno en un ambiente de tranquilidad y placer. En el balcón suena la marimba del Bar y sentado en la barra de madera antigua, se puede disfrutar de una buena plática y de una cerveza mixta on tap (Gallo-clara y Moza-oscura) servida en una bombona. Para boquear, Palomitas al Jerez. La decoración lo traslada a un ambiente de los años 50's desde el diseño de la cerámica del piso, hasta las litografías de mujeres toreando en tacones, con los pechos al aire y las nalgas al sol.

Lo mejor de todo es que se sale a las once de la mañana comidos y bebidos, listos para disfrutar de un sábado más en esta bella ciudad.

Por la buena cocina y bebida que alimenta nuestras mañanas de sábado, El Centro de Guatemala, ¡Approved!

Tour Fotográfico del centro de Guatemala en Casa Katharina, un guest house solo para damas


sábado, 6 de marzo de 2010

Cocinando con mi Abogado: Chuletas Webber

"En un asado se habla de lo que se come y de lo que se bebe y para hablar de algo hay que saber"

Roberto Marín y Héctor Salgado autores del Manual del Parrillero Criollo

De dos a tres veces por semana, nos reunimos con mi abogado para cocinar y platicar de todo un poco. Como hombres de casta, nos gusta el fuego, el futbol y la cerveza y lo mínimo que podemos estar es preparados para tirar cualquier animal que camine a una buena parrilla. Yo soy de la idea que todo hombre debe de tener las herramientas correctas para las tareas correctas. Por lo tanto, uno debe tener una parrilla Weber (NO tipo Weber, que quede bien claro), una parrilla argentina con elevador y un ahumador en su jardín, listos para tomar protagonismo en cualquier batalla que sean requeridas. Mi abogado ya dio el primer paso comprándose el Ferrari de las Weber de carbón: la Weber Performer.

Las Parrillas Weber sirven para cocinar como los gringos, básicamente es un horno que trabaja con carbón. El combustible perfecto para esta máquina es carbón vegetal, sin embargo su performance se afina con el uso de brickets (a los cuales guardo cierto recelo). La principal característica de este juguete es que el carbón se enciende apretando un botón ya que tiene un sistema de gas propano-butano integrado. Weber complementa esta máquina con una serie de accesorios de muy buena calidad "Made in America". El dia de ayer cocinamos chuletas ahumadas en una salsa de vino y bálsamico, receta del libro de weber titulado: Weber's Big Book of Grilling el cual no dudo en recomendar.

Chibola (mi padre), es un maestro para cocinar chuletas ahumadas. Las consigue cholotonas, de casi 2 pulgadas de grosor y 1 libra de peso, las cocina con su salsa "Tony Roma's" sencilla de preparar y deliciosa para cerdo y pollo:

Salsa Tony Roma's
Mezclar Salsa de Tomate, Salsa Perrins y Miel de Maple. Nada más.
Es raro que una receta venga a competir con las chuletas de Chibola, pero ayer las chuletas Weber aunque diferentes, lograron desbancarlas. Básicamente, el secreto de estas chuletas son dos niveles de sabor: el primero es un rub en pasta muy condimentado y el otro nivel es una delicada salsa, reducción de vino y balsámico que endulza a la chuletona. Veamos:
La pasta: partes iguales de aceite de oliva y salsa perrins, unas cucharadas de chile seco y condimentar con partes iguales de comino ajo y chili powder. La guinda en el pastel: una pizca de canela.

La Salsa: Freir cebolla morada y ajo en aceite de oliva por unos minutos, agregar chile pasa (chile ancho) y freir. Agregar vino tinto, jugo de naranja, vinagre balsámico y Catsup y reducir por 15 minutos y descansar. Pasar por colador y servir.
y para finalizar, el complemento perfecto de las chuletas ahumadas: Pure de papas, pure de manzana y sauerkraut. Pronto les hablaré un poco sobre como preparar estas delicias.

Lo picante en esta salsa se lo brinda el chile en polvo que se agregó al Rub en pasta, el cual se balancea con la dulzura de la salsa. En lo personal, le agregamos un chile habanero llamado Lousianna, un chile bravo y con muy buen sabor.

Por lo tanto, no duden en preparar chuletas a la parrilla, con estas recetas cualquiera aprobará su cocina, nosotros, ya lo hicimos. Approved!

viernes, 5 de marzo de 2010

En la calle: Applebee's

La última vez que fui a un Applebee's fue en Monterrey, México hace más de 8 años. Para serles sincero no me gustaba mucho y prefería ir a la Sierra Madre Brewing Company, un Brew Pub de lujo en esa bella ciudad. En realidad nunca me han encantado los "neighborhood grills" gringos, prefiero los restaurantes pequeños, escondidos ya que se encuentran muchas sorpresas en esos lugares. Sin embargo, hace un par de semanas, paseando con la Monik y Mario Santiago quede sorprendido con lo que encontré alli.

La Mónica escogió el restaurante y fuimos recibido por joviales meseros típicos de esos lugares y de inmediato me ofrecieron la primera promoción: Por ser viernes, tragos a 12 quetzales.

¡Que bien! -dije- más barato que la gaseosa... Así que disfrute un par de Tom Collins. Pedí unos nachos con una salsa exquisita, en su punto y muy parecida a la que yo hago:
Hervir tomates en agua hasta que se ablanden, picar e incorporar tomate fresco, cebolla, cilantro y jalapeño, corregir con sal, y azúcar. Poner a calentar hasta que la cebolla pierda su volatilidad. Moler a mano o con molcajete y servir fría.
Hasta ahí todo bien y yo encantado. Andaba con ganas de volarme una hamburgesa y todas se veían sin chiste a excepción de una creación por Tyler Florence, un Celebrity Chef, medio pussy del Food Network denominada "Aloha Burger"


La pedí con cierto recelo al principio, con miedo a lo que me iban a servir, dando juicio previo a la pobre burger. Pues estuve muy equivocado, dejenme contarles que la bendita hamburgesa estaba deliciosa, no se si ya me habían pegado los Tom Collins, pero supo a verano en Hawaii, con Hawaiianas en bikini de cocos incluidas. En la foto, que he puesto como referencia, aparece un trozo de piña asado en medio de la hamburgesa... para serles sincero no me acuerdo si se la pusieron acá en guate... pero lo que si está muy presente en mi boca es esa salsa de piña y chiles morrones asados a la perfección y la grasa del tocino. (Hamburgesas sin tocino son pan con carne). Calculo que la carne era media libra, término medio, muy jugosa y probablemente Prime o Choice. De quitarse el sombrero.

La Monik pidió para ella y para el choripan una especie de Chicken Tenders, lo cual no se merece discusión. Sin embargo, pidió de acompañamiento puré de papas. Usualmente los Purés que preparan en estos lugares saben sintéticos, como que son de caja... pero estos señores prepararon un monstruo de puré de papas con su piel, mucha mantequilla, leche y abundante cuerpo y aroma a ajo, perfecta. ¡Impresionante! Como lo haría yo:

Puré de Papas con Ajo:
Hervir papas en abundante agua con sal, clarificar mantequilla y saborizar con abundante ajo machacado. Colar la papa y poner al fuego a efectos de evaporar el agua restante. Agregar la mantequilla con ajo, sal, pimienta y dar consistencia de puré con leche entera. Lo más importante de todo, machacarlo a mano para que quede "chunky".
En fin, lo que creía ser una salida desastrosa a un restaurante presuntamente mediocre resultó en una verdadera experiencia sensorial y les aseguro que iré por más a su cocina. Lo mejor de todo para nosotros los chuchos, tacaños, es que la cuenta no subió de 20 dólares.

No hay duda alguna: Applebees, Approved!!

jueves, 4 de marzo de 2010

La Cruda Realidad

Mucha gente me pregunta de donde saque la habilidad y el gusto para la cocina. La verdad es que nunca hay una respuesta correcta, simplemente se aprende de lo que uno ve y hace en casa, y el resto, viene por si solo. Todo se facilita cuando la familia sabe cocinar y uno aprende las particularidades de cada quien. Mi primera experiencia con comida cruda se la debo a mi padre. Un día preparábamos unos pinchos de carne para una reunión y yo ayudaba a armarlos. Estábamos discutiendo con mis hermanas sobre la carne cruda y él nos dijo que el mejor término para la carne era cruda -inmediatamente después, procedió a embutirse un sendo trozo de carne marinada-. Me pareció fascinante su audacia así que sin pensarlo dos veces lo acompañe disfrutando de esa carne ligeramente marinada, fresca y con un sabor a pastizales en verano. Como siempre, mi padre tenía toda la razón.

Pinchos de Carne Clásicos:
Marinar cubos de carne con salsa de soya y abundante ajo, colocar en pinchos en este orden: cuadros grandes de cebolla, tocino, la carne, tomate, chile verde. Repetir hasta completar el largo del pincho. Cocinar a fuego manso de carbón vegetal
Sin embargo, hay maneras más civilizadas de saborear comida cruda. Los sofisticados, para evitar el término "cruda" le han puesto nombre más digeribles: Carpaccio, tartare, sashimi, kibbe, ceviches, etc. y pueden ser de carnes rojas y pescados. La preparación debe ser muy ligera ya que no se debe violar la delicadeza del ingrediente principal, en ese sentido se deben de comer como entradas para poder disfrutar del sabor puro, sin que los contaminen los sabores fuertes del plato principal.

La comida cruda, de vaca, venado, atún, salmón y otras infinidad de animales, se pueden acompañar con preparaciones occidentales:
Aceite de oliva, vinagres (balsámicos, vino o aromatizados), alcaparras, cebollines o chalotes, mostazas preparadas, Hierbas aromáticas (eneldo, anizadas como el hinojo, cilantro, etc.), limón, sal kosher, pimienta fresca o lo que se le antoje y tenga a mano...
Asimismo, se pueden preparar a la usanza oriental. Ustedes ya conocen el sashimi, el cual no se debe de confundir con el sushi el cual los americanos hemos hábilmente modificado para satisfacer nuestras papilas gustativas, preparando roles rellenos, desde carne falsa de cangrejo hasta con queso y aguacate. Sin embargo, la única manera de disfrutarlo es como lo hacen en japón, ya sea como sashimi o nigiri-zushi:
Cortar lascas no tan delgadas de pescado fresco. En caso de nigiri-zushi, montar en una bolita de arroz. Aromatizar la salsa de soya de calidad con un trozo de wasabi. Bañar delicadamente el pescado con la soya y disfrutarlo.
El kibbe que preparan en el medio oriente es muy complejo y así todas las culturas tienen alguna receta que incluya algún ingrediente crudo. Comer y saborear la comida cruda es elemental en nuestro viaje por la vida. Asegúrense de comerla muy fresca y al natural y conocerán un aspecto de la comida que solo pocos hemos disfrutado. Hay que dejarse de mariconadas y en la próxima oportunidad que tengan, disfruten de un trozo crudo de carne, estoy convencido que no se van arrepentir.

La carne cruda más exótica que he comido: Basashi - Sashimi de Caballo. ¡Exquisita!



Por lo arriba expuesto les puedo asegurar:

Comida Cruda, Approved!

miércoles, 3 de marzo de 2010

Approved! TOP 2

Entremos en materia. Hay cosas que no aguanto y son las listas extensas. Peor aún si la lista se ha ordenado por orden de importancia y que tenga cuenta regresiva. En virtud de eso, he simplificado mi lista de comidas favoritas en únicamente 2:

1. Las ostras; y
2. el huevo.

Sencillo, sin complicaciones.

Las ostras son moluscos de respeto y honor. Se aferran tal cual garrapata a lechos rocosos y arenosos pasando su vida filtrando agua de mar, alimentándose y creciendo al vaivén de la mareas altas. Este bivalvo se sujeta a sus conchas con un músculo abductor, bajo el cual se encuentra su corazón que bombea un líquido descolorido por todo su organismo. Este líquido lechoso traslada el oxigeno colado del agua por su cuerpo y le traslada el dulce sabor del mar. Y exactamente en eso se resume la magia de las ostras, es toda la esencia y el poder del mar concentrado en una gelatina.



El Salvador 07 (7)
Cargado originalmente por Ely1974

No hay mejor manera de comer las ostras que abriéndolas uno mismo y comiéndolas directo de la concha. Es obligatorio comer la primera al natural, pura; las siguientes se pueden acompañar con sal, limón y salsa perrins, a cuenta gotas, ya que no es mango verde lo que estamos comiendo. Lo que se disfruta es la ostra y no sus complementos. Es uno de los pocos alimentos que disfruto sin agregarle chile, la acidez le roba sabor. En el futuro no tan lejano, tengo el macabro plan de sazonarlo con algo que los chapines llaman “aguachile”:
Cebolla, hierbas aromáticas (cilantro, hierbabuena, etc…) y chiltepes picados en agua. Agregar sal al gusto.
Sencillo, sin robarle protagonismo a la ostra.

He probado diferentes tipos de ostras y no sé si por costumbre o gusto mis favoritas son las salvadoreñas y hoy, debido a la escasez, las nicaragüenses. Si no me equivoco son de la misma especie y tienen un sabor fresco, salado y si tienen suerte y el dinero, aún se encuentran de buen tamaño. He probado las chapinas y estas tienen un sabor parecido a las cultivadas japonesas. Un par de meses atrás, desayuné con mi abogado dos docenas de ostras chapinas, tienen un ligero sabor dulce, mielosas, y fueron la entrada perfecta a unos taquitos de huevo con chicharrón. Para brindar, cerveza Gallo. No hay mejor manera de comenzar el día sábado, aunque se quejen los amantes de Mister Donut, Biggest y Tre Fratelli.

También he probado las ostras holandesas de criadero, son lechosas y dulces, cabe mencionar que ya estaban pasaditas pero las conseguí a mitad de precio en un viaje a Bélgica. Me han dicho que las gringas no tienen mucho sabor y por esa razón las hacen en sopas y gratinadas, una verdadera lástima. Los japonesitos, a los que guardo mucho respeto, han dado cooperación técnica para la creación de viveros de ostra japonesa en el Puerto de la Unión. He buscado en los mercaditos del MAG a los criaderos, sin embargo nunca los he encontrado. Tal vez necesitan apoyo para lograr una comercialización exitosa.

Y llegamos mi querido lector, al tema más placentero sobre esta joya culinaria, el aumento del deseo sexual, no es ningún secreto que goza de fama de ser el más potente afrodisiaco. Ciertamente les puedo confirmar que la ostra contiene altos niveles de Zinc, uno de los nutrientes esenciales para la producción de testosterona. Es por esa razón que recomiendo disfrutarlas acompañados de una bella mujer a las orillas del mar…



Raw quail's egg
Cargado originalmente por plhu
Huevos a la ostra:


Huevos de Codorniz crudos, servidos en un caballito (shot glass, onzero), gotas de limón, sal, salsa perrins y chile. Se puede sustituir con huevo de gallina o de faisán. Sorprendentemente tienen el mismo efecto afrodisíaco que la ostra.
El huevo es otra comida que sobresale sobre el resto. No solo es el alimento sino el ingrediente más versátil en la cocina, fácil de preparar y con un sabor sin igual. Dos tercios del huevo se compone de la clara, compuesta en un 90% de agua y el resto es proteína limpia y sana; si esta se cocina sin la yema no contiene colesterol. El otro tercio lo completa la yema, la cual provee de energía al pollito que crecerá adentro, y que sinceramente contiene todo el sabor del huevo.

Hay miles de formas de cocinar los huevos y ninguna sobresale sobre la otra; son igual de jabrosos los huevos duros, como los huevos tibios, los pochados, los fritos, los sudados, los picados, los revueltos y los crudos. Sin los huevos como ingrediente, no existiera la repostería como la conocemos, ni emulsiones como la mayonesa y dejo de contar porque la estructura de la gastronomía actual no sería la misma si no contáramos con los huevos.

Sin embargo, hay una preparación que puede llevar al comensal al éxtasis culinario:

Cocinar un huevo estrellado ( usted escoja: de gallina, codorniz, pata o faisán), separar la yema semi cruda y colocar en un pan o volován pequeño, con cuidado de no romperla. Una pizca de sal de mar gruesa, o sal kosher o hueva de pescado salado (caviar, salmón o masago). Comer de un solo bocado y disfrutar de una verdadera explosión de placer.
Los huevos pueden ser resaltados con sabor combinándolos con absolutamente todas las salsas de chile, sin embargo, los mexicanos son los creadores de mi favorita: la salsa ranchera mexicana:


Aromatizar aceite con laurel, tomillo, pizca de comino, un clavo y abundante ajo. Cocinar cebollas, chile verde, tomate o tomatillo (chiltomate) y pasta de tomate. Corregir con sal, pimienta, azúcar, y dar consistencia con agua. Agregar variantes de chile según humor: (jalapeños y/o serranos, chiltepes, diente de chucho, o chipotles adobados). Servir en una cama de huevos estrellados, con cilantro a discreción.
Para finalizar, hay huevos por todos lados, en algunos lugares más que otros, pero como vi hace unos días en una calcomanía de carro… los que tienen más huevos no son las aves, son los hondureños.
Por las razones arribas expuestas:
Approved!! Los Huevos y las Ostras